Capitulo 8

- No sabía que los bollos estuvieran tan buenos- dije por enésima vez.

Bradd simplemente me ignora y baja las maletas del coche.

Cuando estábamos subiendo a mi nuevo apartamento, vemos la puerta de este abierta.

Bradd se pone delante de mi, deja las maletas en el suelo y entra lentamente en la vivienda.

Yo lo sigo, en el hall no vemos a nadie, cuando de repente oímos un estruendo.

- ¡Carallo!*- grita una voz femenina desde lo que debe ser la cocina.

- Eres una tooooorpeeeee- se burla otra voz femenina.

De pronto, aparece en la sala una chica rubia.

-Oh. Hola, soy Amanda, ¿eres la nueva?

- La nueva, que guay- dice una pelirroja en el marco de la puerta sin dejarla contestar-. Yo soy Liliana. Ella es la torpe- dice señalando a Amanda.

- Mentira -dice la otra.

- Hola, yo me llamo Hope. ¿De donde sois?, tenéis un acento extraño.

- España

- Spein

Son extrañas y alegres. Me gustan.

- Eso es de Europa. ¿Que hacéis en Nueva Orleans? Estáis muy lejos de casa.

Las chicas se miran y sonríen.

- Estamos de aventura- dice Amanda.

- ¿Quien es ese?- dice Liliana señalando a Bradd.

- El portero. Le subo las maletas a la señorita.

- ¿Portero? ¿Y dónde estabas cuando subimos nosotras? Porque nadie nos subió las maletas.

- Lo siento- se disculpa- hoy es mi primer día, acabo de llegar y coincidí con la señorita accidentalmente- dice arrepentido.

Me lo creo hasta yo.

Ellas solo asienten con la cabeza y me miran de arriba a bajo.

La pelirroja junta las manos en el pecho a modo de rezo y acto seguido se tira encima de mi para abrazarme.

- ¡OHHH!. ¡Eres adorable! Pareces muy tierna

Yo me quedo pasmada ¿Qué?

No se que hacer así que me quedo quieta y espero a que me suelte.

- Esto... gracias- digo con las mejillas rojas.

- ¡Oh! te has sonrojado. ¡Qué linda!

La rubia sigue en silencio mirando la escena, aunque parece que va explotar de risa en cualquier momento.

- Gracias, señor... portero- digo siguiéndole el juego.

Él asiente y tras un "de nada" se marcha.

- Bueno- habla la rubia- ¿tu de donde eres?

- De aquí, de Nueva Orleans.

- Y como es que no estas en tu casa, quiero decir, si eres de la ciudad para que te trasladas.

- Mi madre dijo que debía tener privacidad. Y yo también quiero estar un poco a solas. Con mi padre a mi alrededor siempre no puede ser. Él y mis tíos son... "intensos"

La pelirroja me mira con comprensión.

- Es lo que hacen los padres, ya sabes.

Asiento y me siento en el sofá.

- ¿Cuantos años tienes?- pregunta Liliana.

- 17

- ¿Cuando es tu cumple?- pregunta Amanda

- Fue hace dos meses

- ¡Que joven!

- Si bueno, estudié en casa.

- ¿Qué vas a estudiar?- pregunta la pelirroja- ¿tienes novio? ¿o acaso te gustas las...?

- Basta- dice la rubia- la vas a espantar.

- No, no tengo novio.

Ellas se miran entre ellas y sonríen.

- Te vamos a presentar a unos chicos. Son monísimos.

Me quedo pasmada. ¿Quieren buscarme novio?

- No estoy segura. Es decir, ya pasará, no hay prisa. De verdad.

Novio. ¡Jah! Papá lo fusila y me mete a monja!

- No acepto un no por respuesta- dice la pelirroja.

- Eso lo decidiré yo

- Jo, pero eres muy dulce, tierna, linda, adorable...

- Para, por favor- digo sonrojada- ¿cual es mi cuarto.?.

- El del fondo- suelta la rubia.

Cojo las maletas y las meto. Era bonito, la verdad es que era el que le gustaba a mamá.

-

¿Quien es mi compañera de piso?- pregunto saliendo de la habitación.

- Las dos- dice la pelirroja-. Somos pareja- concluye cogiéndole la mano a Amanda.

- Oh

- ¿Te molesta?

- No. Solo me sorprendió, no conozco a nadie homosexual, bueno, solo a Joshua...

- Perfecto. Pero no somos homosexuales. Somos pareja.- repite la rubia.

- No comprendo.

- Déjala, Manda.

Miro la hora y veo que son las 7:30 pm.

- Disculpad.

Voy hacia la habitación, cierro la puerta y llamo a papá.

Al primer ring ya lo coge.

- Papá

- Hola, cachorra. ¿Estas bien​? ¿Como llegaste?

Iba a contestar, pero oigo ruidos detrás.

- Estoy hablando yo, Kol.... No, es mi hija, primero hablo yo.... Me da igual, Elijah.... Es mía, mi cachorra, mi niña, solo mía, no vuestra- dice enojado.

- Papá, puedes poner el altavoz, no quiero que os peleéis...

- No, se supone que me llamas a mí.

- Porfa, papi...

Oigo un suspiro de frustración y a tío Kol soltar una carcajada.

- ¿ Cómo te va, princesita?

- Bien, acabo de conocer a mis compañeras de piso.

- ¿Y son buenas chicas?- pregunta tío Elijah.

- Sip. Son simpáticas.

- ¿Son guapas?- pregunta tío Kol.

- ¿Para qué quieres saberlo? Tu estás con Davina.

- Déjalo, Hope- oigo a Davina- es un coqueto por naturaleza. Pero no infiel.

- Por supuesto que no- asegura él.

- Siento hacerte enojar, Tito Kol- digo arrepentida.

- No sientas nada, mi nenita- dice él.

- Basta - dice papá exasperado- ¿qué tal te fue en el viaje? ¿qué tal ese Bradd?

- Todo fue bien, vinimos directamente aquí después de romper el totem- digo omitiendo lo del bollo.

- Hope, ¿cual es tu cuarto?- pregunta mamá.

- El que te gustó a tí, mami.

Ella iba a hablar de nuevo cuando escucho un golpe en la puerta.

- Hope - se oye a Amanda.

Abro la puerta.

- Hola, Amanda- la saludo-. Papá, es una de mis compañeras.

- Oh, estás hablando con tu padre. Lo siento.

- Esa chica no es de aquí, Hopie. ¿De donde es?

- De España, papá.

- ¿De qué sitio?

- No sé.

- Amanda, ¿de dónde sois, es decir de qué sitio....

- Yo soy de Galicia y Lili de Sevilla, ¿por qué?

- Me lo preguntó mi padre. ¿Oiste, papá?

- En Sevilla estuve yo, cielo- suelta tío Kol- las fiestas son geniales.

- Mi tío dice que le encanta Sevilla- les digo a las chicas.

- Dile que si le gusta tanto tiene que ver a Lili bailar la sevillana. Lo hace genial.

- ¿Oíste tío Kol?

- A mi es que me va más la danza del vientre...- dice pensativo- pero la sevillana es sin duda hermosa.

- Dice que es un baile hermoso, y no sé qué del vientre.

- La danza del vientre...- sonríe Lili- tu tío es fiestero.

- No sabes cuánto.

- Hopie- dice papá- si está todo bien, cachorra, debo colgar. Te quiero, cariño.

- Te quiero, Hope-dice mamá.

- Yo también, sobrina- dice tía Rebecca.

- Te quiero también, Hope- dice tío Elijah.

- Yo te amo- dice tío Kol.

- No más que yo- discute papá.

- Os amo a todos. Buenas noches. Te llamo mañana, papá.

Cuelgo el teléfono.

* En gallego